El cine del peculiar director italiano Marco Ferreri que consiguió su consagración internacional con La gran comilona (1973) se podría dividir en tres épocas, yo me voy a centrar en la primera de ellas, impregnada del realismo grotesco en su trilogía de películas producidas en España en tres años, El pisito (1959) que retrata a la juventud treintañera de la época, Los chicos (1959) con retazos de aquella adolescencia de los años 50 y El cochecito (1960) que trata sobre la tercera edad. En esta ocasión me centrare en segundo largometraje, para muchos una obra menor pero para otros en los que me incluyo, una rareza y algo insólito en su cine.
Tras el fracaso de El pisito Ferreri buscó una vía más a tono con el ambiente, el guion deja de lado a Azcona, y propone una mirada entre la ternura y el costumbrismo de las comedias tipo "Calabuig (1956)" de Berlanga. Los Chicos es uno de los primeros intentos de realismo cinematográfico durante el franquismo. La película resulta sorprendentemente fresca y natural. La principal virtud del film es el tono de mediocridad y tristeza con que se aborda la vida cotidiana de los protagonistas.
La película gira alrededor de la historia de cuatro amigos inseparables: Andrés, Carlos, el Chispa y el Negro. Ninguno ha cumplido aún los dieciocho años. Además del porvenir su mayor preocupación es cómo divertirse los pocos ratos que tienen libres. Lo único que desean es divertirse. Sin embargo, la realidad les obliga a enfrentarse con los problemas del mundo de los adultos. Andrés es botones de un hotel, al que acuden famosos toreros, y sueña con llegar a ser algún día una figura del toreo. Carlos tiene dos preocupaciones: sus exámenes del Instituto, que habrán de traerle serios disgustos familiares, y cierta "vedette" de revistas musicales que vive en el último piso de su casa. "El Chispa" trabaja en el quiosco de periódicos, al servicio de un viejo siempre cascarrabias, pero siempre protector. "El Negro", por último, tiene un problema que esconde, pero que le atormenta: las relaciones amorosas de su madre, que le hacen sentir asco y vergüenza. Alrededor de estas vidas se mueven otros personajes jóvenes: las chicas del barrio. Son un grupo de amigas de la misma edad, con quienes los chicos van a la verbena, riñen, discuten, se divierten... y quizá se enamoran.
El quiosco de periódicos situado en el madrileño barrio de Salamanca, será el epicentro del relato. En él se sitúan las historias y descubrimos las tramas de cada uno de los jóvenes, también allí se cruzan acontecimientos secundarios, que muestran la miseria del día a día sin exagerarlas, pero sin edulcorarlas.
En el fondo de la película bulle esa sensación - común a todas las generaciones - de no saber qué hacer con 16 años. No hay que olvidarse que el tema de la juventud abandonada a sí misma es clave en la cultura europea de aquella época. En ese momento, se gestaba el guion de una gran película, "Los golfos (1959)" de Carlos Saura, que nos enseñaba desde otro ángulo la cuestión. Sin concesiones a la comedia cristiana y al sentimentalismo, partiendo de la narrativa del realismo social. Más tarde llegaría la más redonda para mi sobre esta temática de aquellos años, "La Busca (1966)" de Angelino Fons, una gran adaptación de la obra de Pio Baroja. Pero lo insólito de la película de Ferreri es que sus personajes son adolescentes justo antes de la madurez. Las diversas Nuevas Olas, en películas entonces consideradas "duras", narraban historias de veinteañeros de vida sin horizontes. Bueno también es cuanto menos curioso que la película no sigue las reglas comunes de la narración, introducción, nudo y desenlace. El desenlace se lo salta a la torera.
Totalmente recomendable para los curiosos de una época (como en mi caso) o por qué no, para los que quieran recordar su juventud. Ahora conseguirla, es un trabajo arduo, a mi me costo lo suyo.
Director: Marco Ferreri.
Intérpretes: Joaquín
Zaro, Alberto
Jiménez, José
Sierra, Ana
María Vidal, Adriano
Rimoldi, Félix
Dafauce, Charo
G. Ortega.
Escena:
Reseña escrita por Pepe Mata
3 opiniones :
Vi esta película recientemente y, a decir verdad, me sorprendió mucho. Uno de los aspectos que más me gustó fue que recordaba en cierta medida a "La colmena" de Cela, en tanto que la historia ni empieza ni acaba, sino que coge unos pocos días en la vida de unos muchachos sin pretensión de que haya una conclusión ni un desenlace: cuando llegamos a la historia, los muchachos ya se conocen; cuando se acabe, no sabremos qué ha pasado con ellos, si sobrevive el dueño del kiosko donde trabaja Chispa, si la hermana de Carlos descubre quién es su admirador, si Andrés se acabará lanzando a un ruedo...
Para mí, una obra muy recomendable para quien le guste el cine español o desee empezar a conocerlo.
Pelicula que recrea parte del Madrid de finales de los 50. Lo que se progresara en apenas 5 años.
Película poco conocida, difícil de ver pero que gusta y entretiene
Publicar un comentario