Una dura crítica social sobre el entorno de las clases menos favorecidas de la ciudad de México es lo que nos encontraríamos en esta película realizada por el maestro Luis Buñuel y que es considerada para muchos (junto "El ángel exterminador (1962)") su mejor obra entre los títulos que dirigió en el territorio azteca. La historia, envuelta por un tono pesimista y triste que nos persigue durante todo su metraje, estaría centrada en las vidas de un grupo de jovenes de barrios marginales los cuales vagan por las calles sufriendo el duro palo de la pobreza y la delincuencia. Entre el conjunto de singulares personajes que veríamos en el film, (la mayoría de ellos cargados de odio y maldad a causa de las difíciles circunstancias que les rodean) estaría Pedro (Alfonso Mejía), un niño afectado por la falta de cariño de su madre (Stella Inda) e influenciado por la compañía de sus malas amistades, "Jaibo" (Roberto Cobo), un joven delincuente fugado de un correccional y culpable del asesinato de un adolescente de la zona, Carmelo (muy bien interpretado por Miguel Inclán, uno de los famosos villanos del cine mexicano y que estuvo a las ordenes de John Ford en películas como "El fugitivo (1947)" y "Ford Apache (1948)"), un ciego que se gana la vida cantando en las calles y recordando con nostalgia la época del gobierno de Porfidio Díaz o "Ojitos" (Mario Ramírez), un muchacho abandonado por su padre y que ayudará a éste último en sus tareas diarias.
En cuestión de escenas hay bastantes por destacar desde momentos muy dramáticos (el niño muerto arrojado a una montaña de escombros y basura), instantes de violencia (la pandilla de adolescentes apaleando y humillando a un desvalido que se niega a darles un cigarro), secuencias de cariz surrealista (el espectral sueño de Pedro donde ve como que su madre le ofrece unas vísceras para comer) y de cierto erotismo (una muchacha esparciéndose leche sobre sus muslos o esa imagen de la mujer lavándose los pies en una palangana frente la lasciva mirada de uno de los chicos). Como curiosidad, en la fecha de su estreno la película provocó tanto malestar e indignación entre el gobierno y la población más acomodada de México que se llegó a solicitar la expulsión del cineasta del país. Otro detalle a tener en cuenta es que se rodó un final alternativo donde Buñuel suavizaba el drástico desenlace que mostraba el primero de ellos y de paso calmaba las duras críticas a su persona.
En cuestión de escenas hay bastantes por destacar desde momentos muy dramáticos (el niño muerto arrojado a una montaña de escombros y basura), instantes de violencia (la pandilla de adolescentes apaleando y humillando a un desvalido que se niega a darles un cigarro), secuencias de cariz surrealista (el espectral sueño de Pedro donde ve como que su madre le ofrece unas vísceras para comer) y de cierto erotismo (una muchacha esparciéndose leche sobre sus muslos o esa imagen de la mujer lavándose los pies en una palangana frente la lasciva mirada de uno de los chicos). Como curiosidad, en la fecha de su estreno la película provocó tanto malestar e indignación entre el gobierno y la población más acomodada de México que se llegó a solicitar la expulsión del cineasta del país. Otro detalle a tener en cuenta es que se rodó un final alternativo donde Buñuel suavizaba el drástico desenlace que mostraba el primero de ellos y de paso calmaba las duras críticas a su persona.
Director: Luis Buñuel.
Intérpretes: Alfonso Mejía, Roberto Cobo, Miguel Inclán, Stella Inda.
Final original:
Final original:
No recuerdo esta película de Buñuel, aunque he visto bastantes de él.
ResponderEliminarMe parece muy buena la crítica, a pesar de no conocerla, pues da ganas de verla,a pesar de lo trágico
Chary la película es muy buena pero de enorme tristeza por el tema que trata. Dura y realista. Un saludo!
ResponderEliminarDE LAS QUE MÁS ME GUSTAN DE BUÑUEL, Y ME ENCANTA EL CONTRASTE ONÍRICO DE LOS SUEÑOS Y LOS PERSONAJES.
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